La filosofía es la misma: este bolígrafo permite hacer
dibujos sobre múltiples superficies y ‘levantarlos’ para convertirlos en
objetos tridimensionales gracias a que sustituye la tinta por plástico ABS y
PLA (el que se utiliza en las impresoras 3D). Eso sí, la edición 2.0, que
durante estos días está recaudando fondos en Kickstarter, es más fina, ligera,
silenciosa y más fácil de utilizar, y no necesita ningún ordenador ni programa
para que funcione.
También es más segura, porque el plástico que sale por su
punta se enfría de forma más rápida (casi instantánea, dicen los creadores).
Así que sólo hay que enchufarlo a la corriente para que comience a calentar el
plástico y en minutos está listo para “dibujar”.
Sus aplicaciones son múltiples, y están muy orientadas al
mundo educativo: esperan convertirlo en una herramienta habitual en las aulas
que pueda utilizarse para cualquier materia (siempre con alumnos de más de 14
años), desde geometría a arte Opinión:
En mi opinión este nuevo invento es muy interesante ya que
durante miles de años se han hecho dibujos de toda clase pero nunca han sido
representados en tamaño real. Su forma irá evolucionando como ya ha pasado con
otros aparatos tecnológicos. Dentro de poco será el regalo perfecto para
aquellos aficionados al arte o dibujo.
Alba Montes Alonso 2ºC Nº25